Ayer era noche de viernes e increíbles cosas podían suceder. Y eso nos recordó Brandon Flowers y su banda. Alrededor de las 6:30 se abrieron las puertas y la marea de gente que se encontraba ahí empezó a entrar para empezar a llenar el estadio de avenida Patria. Muchas personas con sus playeras, con letreros, al punto que te empezaba a dar envidia por no haber llevado una.
La banda invitada, Louis XIV empezó a tocar a las 8:15 para terminar a las 8:40 su breve participación, aunque aún había muchos despistados que buscaban su spot o que estaban aun comprando sus bebidas y avanzando como podían entre la gente. Y como es normal las ansias empezaron a dominar al público, que deseaba ver ya a los de Las Vegas entrar al escenario. El deseo general se cumplió a las 9:35 cuando la última canción de ambiente dejó de sonar y la banda entró al escenario para solo tomar sus instrumentos y empezar a tocar Mr. Brightside, para que estallara el asunto.
Cerveza (ojalá) empezó a volar por los aires, y toda la gente saltaba y cantaba mientras unos visuales muy interesantes acompañaban la música. Con las canciones siguientes el público se empezó a fundir cada vez más con la banda, con Brandon Flowers invitando a todos a cantarlas con ellos. Tocaron Spaceman, The Way It Was, Smile Like You Mean It, Bones y cuando empezó Shadowplay el juego de luces fue impresionante.
Continuaron con la presentación de Battle Born, su último disco con el tema Miss Atomic Bomb. Ya con esa se empezaban a ver caras de emociona nostálgica entre el público con una canción llegadora como esa. Y más aún cuando dos canciones después Brandon se fue al piano y empezó a tocar Here With Me.
Ya se empezaba a sentir cerca el final y la gente se había apagado un poco, pero las pilas se recargaron completamente cuando tocaron Read My Mind, Runaways y All These Things That I’ve Done, que estuvieron acompañadas de fuegos artificiales, visuales y con las voces de todos los presentes. La ultima se extendió incluso de más con el público coreando “I got soul but i’m not a soldier” a todo pulmón.
Ya en el Encore cuando tocaron When You Were Young, nadie se quedó sin cantar y cerraron con Battle Born, que la extendieron para que Brandon pudiera presentar a la banda y despedirse del público tapatío. Antes de irse Brandon Flowers se entrego al público, literalmente. Se bajó del escenario y se unió con todos los fans que estaban al frente, que hicieron todo por lograr tocar al cantante.
Al final de la noche muchos sueños se cumplieron y muchas voces cantaron, y es que con la trayectoria que tiene The Killers y lo que representa no podía ser de otra forma.