RESEÑA: MONOCEROS – IN GIRUM IMUS NOCTE ET CONSUMIMUR IGNI

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El Post-rock se dice que es un género que se ama por su estética natural o se odia por supuestas acusaciones de ser ”tediosón”. Pero matando esta acusación, generalmente cuando se tiene la paciencia suficiente de escuchar álbumes enteros (por ejemplo de Explosions In The Sky, poniéndoselas fácil dudes (SIN adelantarle)) para darle la oportunidad al género, esa paciencia que para buenos y dispuestos oídos no es difícil de adquirir y que se utiliza también para perderle el miedo a escuchar nuevos grupos o propuestas musicales, regularmente la respuesta es un ”Ájalas, suena bien”.

En lo personal es un género que me late bastante ya que cada nota te suele ir narrando historias y lo considero muy versátil como soundtrack del día a día. Perfecto para viajar, empezar/terminar la jornada, leer, prepararte unas suculentas enchiladas, embriagarse con buena compañía, volver menos nefastos los momentos de hacer tareas, caldear y etcétera-seses.

Y para todos aquellos que gustamos del Post-rock es muy bueno saber que la escena mexicana ha madurado bastante en los últimos años y ofrece música de calidad. Entre este marco nacional se encuentra Monoceros, banda oriunda de Tepic, Nayarit, que nos ofrece con descarga gratis su primer álbum de estudio In Girum Imus Nocte Et Consumimur Igni (que su traducción del latín es algo como: Damos vueltas en la noche y somos consumidos por el fuego) cuya concepción duró casi 5 años resultando en un viaje de casi 53 minutos que valen harta pena para sus seguidores y que recomiendo escuchar su autodefinido Post-Coitus-Rock (jaja) a una sola sesión.

Comienza con Luces de catarsis, canción que desde que suena te va anunciando la calidad e intensidad del álbum, con un llano a mitad de la canción en el que unas oscuras vocales recitan la escena final de la película Wit para continuar con una ráfaga de cuerdas con mucha fuerza denotando esa catársis. El nombre del segundo track es  _______ que lo interpreto como 7 guiones para 7 minutos que son como un sandwich en los que los panes (comienzo y final) son los que tienen el mejor sabor. En Abandonado en el Cosmos, Inundado de ecolalia se encuentra cierto clímax en el álbum con sus percusiones más cargadas de bajo. Reynolds, de mis preferidas, es una de las canciones con mayor sutileza en sus notas, que denota más experimentación, soltura y mucha energía. Arctic Hysteria es otra para el disfrute que con sus matices más nostálgicos es ese característico y muy bien logrado track sereno que funge como pre-outro para enseguida cautivarnos con Veda Skyes Perpetual Light Effluvium, colmada de una amplia gama de emociones siendo un gran broche para este álbum debut de los nayaritas que prometen grandes cosas si combinan talento con innovación.

 

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